Conoce a los guardianes secretos de la selva ecuatoriana

Conoce a los guardianes secretos de la selva ecuatoriana

¿Conocías el riesgo que corren los guardianes secretos «Los Taromenanes»? Ahora te contaremos un poco sobre su historia con el objetivo de recordarlos, escucharlos y apoyarlos.

Los Taromenane son un grupo humano indígena no contactado que viven en el Parque Nacional Yasuní, estos comuneros comparten territorio junto a los Tagaeri y los Waorani.

Están ubicados en la cuenca amazónica ecuatoriana, entre los ríos Yasuní y Curaray, en donde la zona abarca aproximadamente 700.000 hectáreas de la zona sur del Parque.

En 1999, se decretó zona Intangible Tagaeri Taromenane (ZITT) dentro del Parque Nacional Yasuní. Esto significaba que esa zona estaría vedada a perpetuidad para operaciones extractivas, incluida la actividad petrolera, cosa que hasta ahora no se ha solucionado del todo, ya que mientras más pasa el tiempo, estos pueblos están más vulnerables a este tipo de conflictos.

En la actualidad existen aproximadamente unos 150 a 300 Taromenanes y unos 20 a 30 Tagaeris, que aún mantienen el nomadismo en las pluviselvas, practicando su cultura ancestral.

Viven en grandes chozas de materiales vegetales, en grupos familiares agrupados de entre 20 y 50 integrantes. Cazan, pescan y se defienden con lanzas y cerbatanas. Abandonan este hábitat cuando se agotan las fuentes de alimentos, y es lo único que hasta ahora se ha podido saber.

Los Taromenanes han estado recientemente bajo amenaza de la explotación petrolera y la tala ilegal en el Parque nacional Yasuní.

El 15 de febrero de 2008, autoridades del Ecuador acordaron investigar un reporte que indicaba que cinco miembros de los Taromenanes y Tagaeris fueron asesinados por taladores ilegales, sin embargo no se ha llegado a ninguna conclusión por parte del Estado ecuatoriano.

De igual manera en el 2013, se hizo más sensible este tema, tras la matanza de una familia importante Taromenane  por parte de rivales Huaorani, que además secuestraron a dos niñas, así por la decisión presidencial de explotar crudo en uno de los yacimientos ubicados dentro del parque nacional Yasuní.

Este post está dirigido para el resto de ecuatorianos que quizá no conocen sobre la existencia de estos hermanos ecuatorianos, que necesitan ser escuchados ya que ellos no pretenden migrar a las grandes ciudades en busca de trabajo.

Ellos lo que quieren es conservar lo poco que nos queda de selva amazónica que es su hogar y la herencia a futuras generaciones, no solo de ellos sino de todos los ecuatorianos.

Debemos verlos como los amantes y guardias de las fronteras selváticas, luchadores por evitar el derrame de petróleo en suelos en donde cada espacio es megadiverso.

Es cierto que una parte importante de ingresos del Ecuador es por la explotación del petróleo, pero es un recurso inestable que deja mas pérdidas que ganancias.